Ayer te vi

Ayer te vi, sé que eras tú, quizá en otro tiempo, en otro lugar, en otra mujer. Pero eras tú, sin duda alguna: era tu risa y tu pelo, era tu niña y tu bolso, eran todas las promesas que nunca me hiciste, todo lo que tú y yo nunca fuimos ni seremos. Indudablemente eras…

Vérsame

Los besos que más duelen son aquellos que no damos, las vidas que más hieren son aquellas que no vivimos, que imaginamos y soñamos cuando cae la noche, cuando cae el alma por el abismo imparable de la pena, del tedio, de la impotencia ante esta masa pegajosa, ante el cronopio que baila tregua y…

Pare, taxi

Pare, taxi, que me bajo del mundo si no subes tú.

A ver cómo te explico yo

Porque pienso en tu nombre y me vienen las lágrimas a los ojos, y no estás ni estarás ni se te espera, y reniego de este perro mundo. Ven y sácame de aquí, que ahora yo sólo veo con la mirada inyectada en sangre, con las neuronas erizadas de dolor y odio y rabia, obsesionado…

Me calaste hondo

Me asomo al precipicio. Tanto tiempo en el borde, en el filo, en el saliente de la nada, acaba por agotar, por cansar la vista, el alma, el corazón, la mente. Los sentidos azotados por el viento y el nudo en el estómago del vacío absoluto. Momento de saltar o volver a casa o descerrajarle…

Lágrimas en la lluvia

No sé si fue Luis Ramiro en vena, con su monstruo en el armario, o los Beatles cruzando Penny Lane, o fue todo lo que cayó durante el día y la noche, todo el día llovió, toda la noche lloviendo, deseando perderme de una vez por todas contigo, ahora que sólo aspiro a rendirme y…

Escondido en Manhattan

Sueño con perderme, en la mejor de mis suertes contigo. Sueño con lluvia y fuego y leer el invierno de Vivaldi en tus tatuajes mientras el tiempo se extiende perezoso y lánguido, casi indolente. Sigo buscando la salida en este laberinto de distancias geométricas y algorítmicas, anhelando música y teatro y mercadillos y césped y…

Escorado a babor

Sigo oyendo mi música mientras repaso mis quehaceres, atoro brechas de agua, ciego ventanas. Me voy hundiendo mientras suena la música. No tengo ganas sino de llorar. No le veo solución a nada de lo que me rodea, no estoy contento con nada ni nadie, no soy feliz. Porque todas las canciones llevan tu rostro,…