¿Qué te puedo decir cuando se cortan las líneas de comunicación en esta guerra que nos separa? ¿Cómo decirte que soy todo dudas y miedos cuando no sé de ti? ¿Cómo avisarte de que mi puerta está abierta; mi corazón, esperándote y mis labios deseando a los tuyos cuando me abrazas y besas? ¿Cómo mandarte…
Categoría: poesía
Tener o no tener
Hoy me he decidido a recordarte, a revivirte en mi mente. A recrear tu voz diciéndome que me amas. A sentir tus manos enlazadas con las mías. A mirar tus ojos con la vista en mis pupilas. Porque no tenerte no significa que no nos amemos; no significa que la distancia abra abismos entre nosotros;…
Casa
Me pides guerra cuando trajiste la paz a mi vida. Y no dejo de mirarte mientras sonríes, cuando hablas, cuando tus manos buscan en el aire mis labios. Me pides guerra y me faltan palabras para rendirme, me faltan miradas para perderme en tus ojos, me falta tiempo, mucho tiempo para perderme contigo en el…
Terremotos en la piel
Un día llegó ella y sacudió todas mis cicatrices. Fruto de aquel terremoto, se abrieron nuevos ríos y montañas, que dieron trabajo a los ociosos cartógrafos de mi alma, y que cambió, gracias a ella el aburrido mapa del desierto que había sido hasta ese momento mi vida.
Me gustaría ser poeta
Mis amigos me piden que escriba otro tipo de poemas. Poemas sobre la vida, los árboles, los hombres sobre el ser humano o este mundo maravilloso que agoniza. Que deje de escribir poemas de amor, de desamor a veces. Y que, si no puedo hacerlo, que deje de usar ciertas palabras en mis poemas: palabras…
Para siempre
Ya te has ido, y Madrid se convierte en un desierto que proclama tu nombre entre dunas de cemento. Ya te has ido, ya no estás, y guardo tu sombra en la pared, cuidando que no se borre cuando caiga la tarde, cuando me quede sin la luz que trajiste al conocerte. Salgo a la…
Él y ella
La abrazó por detrás rodeando su pecho. Ella le dijo: ¿Estás bien? Él le dijo: ¿Cómo no voy a estar bien si estoy contigo?
Esperaré
Esperaré porque te estaba esperando desde que nací, y entonces ni siquiera sabía tu nombre. Así que ahora que te conozco, me pregunto cómo he podido vivir tantos años, malvivir tantos años sin tus abrazos, besos y caricias. Quizá por eso, por haber vivido tanto tiempo, por haber malvivido tanto tiempo en ese desierto que…