Acabo de llegar de viaje, y me he sumergido en el tráfago de la vida para tratar de limpiar el parabrisas de los impactos del trabajo. Dos días fuera saturan los buzones. Dos días fuera que, de alguna manera, dejando aparte el destino y los motivos, han sido un bálsamo de esperanza. Porque a veces,…
Categoría: personal
Un océano de amor
Esta bitácora, este blog no deja de ser un río de una vida, la mía. Como un río, a veces es torrente, a veces río, a veces tempestuosa cascada. Como una vida. Y vierto al río mis penas, mis lágrimas, mi rabia, mi frustración y, cómo no, mi amor y desamor. Lo dije en una…
La antesala del terror
Se acercan las fiestas de mi pueblo. Como no conocéis mucho de mi historia, éstas no son fechas nada agradables para mí. Por suerte, mis vacaciones se acaban y el trabajo vendrá a salvarme, con una dosis de esperanza justo en la hora más negra, al comienzo de todo. Se empieza a terminar un mes…
No me sirvo
No me sirvo si te llevo al cielo sólo para bajarte al infierno. No me sirvo si me llamas y no estoy, si te espero cuando no estás, si te llamo cuando sales a la compra. No me sirvo si mis besos no te sanan, si mis palabras te hieren, si mi tiempo no es…
El cuento de nunca acabar
Anoche, mientras dormías, te hice canción. Conocí a una princesa con alas en los pies, rayos en la risa y flores en el pelo Me cogió de la mano y me llevó a su reino de hadas y elfos, de grifos y dragones. Aquella noche, antes de dar las doce, me besó en los labios…
21
Entonces apareció el zorro: -¡Buenos días! -dijo el zorro.-¡Buenos días! -respondió cortésmente el principito que se volvió pero no vió nada.-Estoy aquí, bajo el manzano -díjo la voz.-¿Quién eres tú? -preguntó el principito-. ¡Qué bonito eres!-Soy un zorro -dijo el zorro.-Ven a jugar conmigo -le propuso el principito-, ¡estoy tan triste!-No puedo jugar contigo -dijo…
KO
Por primera vez en mucho tiempo estoy tendido sobre la lona. Totalmente noqueado, con una percepción irreal, fantasmagórica, de todo lo que me rodea. Quizá parezca injusto decir que ni la he visto venir, pero no me he enterado de nada hasta que he besado la lona, cuando lo que quería en realidad era besarte…
Hasta septiembre
Históricamente siempre me cogía vacaciones del blog en septiembre. Más que nada, porque son mis vacaciones obligatorias, y no sabía si podría o me apetecería seguir escribiendo. Además, hay mucha gente de vacaciones. No sé si este año haré lo mismo, pero por si acaso me despido. No me apetece despedirme: me apetece seguir lanzando…
Días raros
Escribo menos, por muchos motivos. Y no todos ellos malos, hay que decirlo. Porfesionalmente tengo un pico de trabajo que me agota mentalmente y esquilma mi tiempo. Las reuniones no ayudan, y las setas y los incendios a apagar tampoco. En lo personal todo me está dando vueltas. Como si me hubiera atropellado un autobús…