¡Que vienen los rusos!

Supongo que a veces se me ve el plumero, y se nota demasiado mis simpatías por la madre Rusia, por esa actitud orgullosa y desafiante que siempre ha mantenido ante los americanos, y esa forma peculiar de enfrentarse a todo, incluso a ellos mismos, para acabar sufriendo como nosotros. Somos, en muchos aspectos, parecidos a…