Las películas tienen poco que ver con la vida real. Nada justifica un Lagavulin en un solo día. Un poco de sangre para el bautizo, la llamada de la selva suena.
¿Dónde estás? No vienes a salvarme y cada día las noches son más largas. Vámonos a cualquier lugar en el que sólo puedaver tu rostro al despertarme.
Nada de nada tiene sentido hasta que todo acabe, hasta que todo encaje, hasta que sepa a dónde quiero llegar.