Terremotos en la piel

en
Abrázame, Marazu y Mikel Izal
Un día llegó ella
y sacudió todas mis cicatrices.
Fruto
de aquel terremoto,
se abrieron nuevos ríos y montañas,
que dieron trabajo a los ociosos cartógrafos de mi alma,
y que cambió,
gracias a ella
el aburrido mapa del desierto
que había sido
hasta ese momento
mi vida.