Tan lejos y tan cerca

en

Cinco días alejado de casi todo me han hecho darme cuenta de que donde estoy está exactamente a más de mil kilómetros de distancia de donde quisiera estar. Lugar éste, donde quisiera estar, que ahora mismo no tengo nada claro dónde es.

Que todo es apacentarse de viento lo tenía claro, ya lo dijo el Eclesiastés, y la respuesta está escrita en el viento. Pero los cinco días fuera, alejado de todo influjo maligno, me ha hecho darme cuenta de que no necesito nada de esto para vivir. Lo tenía casi todo, y lo he desperdiciado en vano. Donde hoy estoy no me aporta nada.

Ya ves, le sigo dando vueltas. Si no hacemos que esto valga la pena no tiene sentido seguir.

2016-07-11 11.31.39