Mi ordenador portátil Toshiba Portege Z930, con disco duro SSD, dijo basta. Ya le amplié la memoria a 10GB (cuando el manual dice que sólo soporta 6GB, pero es falso) y ahora le ha tocado el disco duro SSD, que lo he pasado de 128GB a 500GB. Mi problema: no quería perder los datos ni volver a instalarlo de todo. Tras muchos (y fallidos) experimentos, por fin conseguí ayer migrar todo el disco duro tal y como estaba y ampliar las particiones. Me cargué una partición «desconocida» que parece ser que era una caché de Intel y la partición de recuperación del S.O. Sigue funcionando. Sólo me ha costado una semana de pruebas, errores, blogs, Clonezilla y GParted. Sí, Linux es el LandRover de los sistemas operativos.

Si alguien necesita algún dato, que lo pida.

Esta noche la entrada seria.

P.D.: Shit happens! La Ubuntu 16.04 me ha jodido un poco bastante.