De nuevo hoy un rato solo. Un rato conduciendo en soledad, trabajando en soledad, equivocándome en soledad, perdiendo el norte en soledad. Tratando de decidor hacia dónde debo dirigirme, dirigir mi vida. Qué paso debo dar. Tengo principalmente dos pasos que decidir, dos abismos a los que asomarme, decidor si los cruzo, si salto, si consigo volar.
Son dos temas muy personales, decisiones que pueden cambiar toda mi vida de arriba a abajo. Sabiendo con certeza que ninguna de ellas es cómoda, que ninguna me asegura nada. Tan sólo la incertidumbre, el camino, el reto. El futuro.
Una mala historia, una mala decisión. Todo un puñado de certezas que me abofetean diciéndome que eres la decisión equivocada, y aún así sigo persiguiéndote.