No me entediste

en

No entendiste nada:
no quería acostarme contigo,
quise dormir contigo.
No quería verte las tetas,
miraba tu corazón.

Ahora
volamos
cada vez más lejos,
nuestros trazos se alejan
como pájaros en la tormenta.

Yo, tonto de mí,
todavía sueño
con dar volando la vuelta al mundo
y volver a cruzarme contigo
para ver
si esta vez
me entiendes.

Aunque, mucho me temo,
puede que esa vez
yo ya no te entienda,
y quiera
dormir con otro cuerpo,
acariciar otro corazón.