Y así, un poco sin quererlo, vas dejando que la resaca te aleje de la orilla, que el mar te acoja y te pierda en su memoria, te borre de la memoria colectiva, de los recuerdos de quienes te amaron y te odiaron.
Soy experto en asuntos de derrotas. De abandonos. De decepciones. Puedo escribir un tratado de cómo perderlo todo sin que se note, de cómo vaciarte con una sonrisa, de como rendirte por dentro y seguir defendiendo la muralla a sangre y fuego.
Experto en equivocarme contigo y seguir manteniendo la falsa sonrisa de un triunfador.