Personalmente no lo veo nada claro. Llevo ya un par de semanas en los que no veo claro todo lo que me rodea. He perdido la perspectiva, la orientación. Ya no sé si lo que hago es lo que debo hacer o no. Ya no creo en lo hago, ni hago lo que creo.
Y eso me está causando demasiada tensión, demasiada angustia. Tengo demasiados frentes abiertos, alguno demasiado importante como para dejarlo de lado, y empiezo a sentir la necesidad de soltar lastre, de volver a coger algo de tranquilidad.
Mal. Rematadamente mal.