Los lunes que nos quedan

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Esperando, entre la decepción y los recuerdos y la abulia que me atenaza, que pasen unos días y todo vuelva a la normalidad. Tan sólo fogonazos de esperanza que me guían en mi camino a través de la oscuridad, aunque hace tiempo que ando por andar, por no detenerme en la cuneta a esperar el autobús de las 10.
¿Cuántos lunes quedan hasta mi estación a ninguna parte?