Si puedes
Seguramente ahora estás bailando
con gente alrededor deseándote, mirándote,
como yo te miraba en el salón tú te movías para mí, esas caderas de algodón.
y hay una niña abajo en la escalera que cada vez que bajo pregunta por ti.
Y me pregunto que será de mí, si habrá alguien más después de ti, si todavía me recuerdas.
Ay, mi amor, no sabes lo que ha sido verte
tumbada en el sillón de enfrente
hablando del amor como el que habla de algo suficiente
para vivir eternamente y hoy canto la canción, la que juré jamás hacerte.
Curioso vivir en tu ciudad y nunca verte, qué suerte, saberte tan hermosa.
Hay gente que ya perdió la vida por quererte, nunca como yo.
Difícil seguir ahora adelante mas lo intento, no es cierto que pude darte más;
mi niña, que quise hacerte madre, separaste la paz del verbo amar
de éste que ahora te canta.
Ay amor, no sabes lo que ha sido verte.
Mirándote a los ojos, vuelve,
pero esta vez si puedes quiéreme,
pero esta vez si puedes quiéreme,
pero esta vez…
Aún te recuerdo
Aún te recuerdo…
con la palma de tu mano en mi jardín,
con la voz de mi piano en tu reloj,
con tu acento acariciándome el amor…
Aún te recuerdo…
goteando notas de felicidad,
con tu mala suerte y mi ropa interior,
con las ganas de parar el ascensor…
Te recuerdo como un niño en día de reyes sin tambor,
como olas de una playa en mes de abril,
escribiéndote en la arena «ven a ver».
Te recuerdo como un preso recordando libertad,
con la duda de si has olvidado ya
entre el llanto de los ruidos de ciudad.
Hay un niño en el mercado que me mira con tus ojos,
ya no sé si por momentos eres tú.
Llega tarde el colectivo y me entretengo con el guiño
del volar equivocado de un avión.
Con sus alas, soñándome ya con ellas,
esquivando nubes, desnudarte como lo hice ayer.
Que, antes de que pise tierra, tiembles de temor
sabiendo la locura que en tus labios fui a beber.
No me atrevo a abrir los ojos,
pues te juro que hace un rato
es tu voz la que escuché, casi gritando.
Y, de no ser tu rostro, acabaría con todo:
con los ríos, las cosechas, los mares, la poesía…
Nadie va a hacerme reír si no es tu risa.