Aunque nada igualable a la versión que viví en directo de este tema en Valencia, cuando en la oscuridad Enrique Urquijo se subió a un altavoz y a capella comenzó esta canción, mientras sólo le acompaño a ratos al teclado Jesús Redondo.
P.D.: Ayer acabé, con un beso y una flor, mi botella de GlennFiddich. Larga vida a GlenFiddich. Ahora me paso a Lagavulin.